Lluvia de críticas de concejales al concesionario de la nueva terminal
Ahora se sumaron las de Diego Garciarena y Vilma Baragiola. El kirchnerista dijo que Otero “no puede ser uno de los paladines de las inversiones en Mar del Plata”. La radical lo acusó de incumplir los pedidos que les habían hecho.
Lejos de apaciguarse, las críticas de los concejales al concesionario de la nueva terminal, Néstor Otero, se vuelven cada vez más fuertes. A los cuestionamientos que le habían formulado Carlos Katz (UCR) y Guillermo Schütrumpf (GEN), se sumaron los de Diego Garciarena (Movimiento Nacional y Popular Marplatense) y la jefa del bloque radical, Vilma Baragiola.
“No nos gusta para nada que un tipo que sale en los diarios por los allanamientos que le hacen o por las irregularidades que investiga la Justicia sea uno de los paladines de las inversiones en Mar del Plata”, disparó Garciarena.
El lunes, las oficinas de la empresa TEBA, que tiene la concesión de la terminal de ómnibus porteña y también pertenece a Otero, fueron allanadas por orden del juez federal Norberto Oyarbide. La diligencia se llevó a cabo en el marco de la causa contra el ex secretario de Transporte de la Nación Ricardo Jaime, por presunto enriquecimiento ilícito.
A la vez, Otero es uno de los socios de uno de los proyectos para que el edificio de la vieja terminal -ubicada en Alberti y Sarmiento- se convierta en un centro cultural y comercial. “No sería nada bueno para la ciudad que este hombre, con la metodología y la forma de proceder que tiene, consolide negocios con el estado municipal”, advirtió Garciarena.
El edil consideró que las críticas de los vecinos de la nueva estación de ómnibus son “absolutamente razonables”, y subrayó que durante el último fin de semana largo se produjeron “los mismos problemas que en la temporada de verano”.
Se quejó, además, porque recién ahora el Concejo está tratando un régimen de sanciones para colectivos que incumplan las normas. Y marcó que el pedido a la Nación para que le quite la concesión a Otero “puede ser una medida” que vaya a tomar el Concejo, aunque advirtió que la potestad sobre la concesión la posee el gobierno nacional.
En los primeros días de la semana, la presidenta del bloque radical envió a parte de su equipo de colaboradores a que constatara si se habían cumplido los pedidos que los concejales le habían hecho a Otero. “Pero no hizo prácticamente nada de lo que solicitamos”, reveló.
Esos pedidos buscaban que mejorara el funcionamiento de la nueva terminal. Estaban contemplados en un proyecto –redactado por Baragiola- que el Concejo aprobó por unanimidad. “Los incumplimientos contractuales siguen siendo tantos como antes”, arremetió la concejala.
Por caso, el principal organismo de control (la Comisión Nacional de Regulación del Transporte –CNRT-) no tiene una oficina en el predio. En cambio, funciona en la vieja estación.
El martes, su compañero de bloque Carlos Katz había anunciado la presentación de dos proyectos de comunicación: uno para solicitarle al estado nacional que investigue la tramitación por la cual “Jaime otorgó la concesión de la nueva terminal”, y otro para pedirle al intendente Gustavo Pulti “que no avance en actos administrativos a favor” del empresario hasta tanto no haya una resolución judicial.
“No nos gusta para nada que un tipo que sale en los diarios por los allanamientos que le hacen o por las irregularidades que investiga la Justicia sea uno de los paladines de las inversiones en Mar del Plata”, disparó Garciarena.
El lunes, las oficinas de la empresa TEBA, que tiene la concesión de la terminal de ómnibus porteña y también pertenece a Otero, fueron allanadas por orden del juez federal Norberto Oyarbide. La diligencia se llevó a cabo en el marco de la causa contra el ex secretario de Transporte de la Nación Ricardo Jaime, por presunto enriquecimiento ilícito.
A la vez, Otero es uno de los socios de uno de los proyectos para que el edificio de la vieja terminal -ubicada en Alberti y Sarmiento- se convierta en un centro cultural y comercial. “No sería nada bueno para la ciudad que este hombre, con la metodología y la forma de proceder que tiene, consolide negocios con el estado municipal”, advirtió Garciarena.
El edil consideró que las críticas de los vecinos de la nueva estación de ómnibus son “absolutamente razonables”, y subrayó que durante el último fin de semana largo se produjeron “los mismos problemas que en la temporada de verano”.
Se quejó, además, porque recién ahora el Concejo está tratando un régimen de sanciones para colectivos que incumplan las normas. Y marcó que el pedido a la Nación para que le quite la concesión a Otero “puede ser una medida” que vaya a tomar el Concejo, aunque advirtió que la potestad sobre la concesión la posee el gobierno nacional.
En los primeros días de la semana, la presidenta del bloque radical envió a parte de su equipo de colaboradores a que constatara si se habían cumplido los pedidos que los concejales le habían hecho a Otero. “Pero no hizo prácticamente nada de lo que solicitamos”, reveló.
Esos pedidos buscaban que mejorara el funcionamiento de la nueva terminal. Estaban contemplados en un proyecto –redactado por Baragiola- que el Concejo aprobó por unanimidad. “Los incumplimientos contractuales siguen siendo tantos como antes”, arremetió la concejala.
Por caso, el principal organismo de control (la Comisión Nacional de Regulación del Transporte –CNRT-) no tiene una oficina en el predio. En cambio, funciona en la vieja estación.
El martes, su compañero de bloque Carlos Katz había anunciado la presentación de dos proyectos de comunicación: uno para solicitarle al estado nacional que investigue la tramitación por la cual “Jaime otorgó la concesión de la nueva terminal”, y otro para pedirle al intendente Gustavo Pulti “que no avance en actos administrativos a favor” del empresario hasta tanto no haya una resolución judicial.
Redacción El Atlántico
Continúan los inconvenientes de los vecinos de la nueva Terminal
"Hoy no tenemos relación con Otero, no hay diálogo entre nosotros y los problemas siguen exactamente igual”. Así define Daniel Rubio, vecino de la zona y suerte de vocero de la situación por la que atraviesan, que recibió una llamada intimidatoria del concesionario tiempo atrás.
“No hubo mejoras, a excepción del cambio de volumen de los parlantes, que fue casi obligado. La entrada está rota y las obras hace 60 días no se siguieron”, afirmó y reafirmó que “no se hizo absolutamente nada”.
Preocupado y molesto por la situación que estaban viviendo los vecinos con la construcción de la terminal, Rubio comenzó a investigar los negocios de Otero en Mar del Plata, Buenos Aires y otras localidades de la Provincia. Buscando información sobre las actividades del concesionario, se enteró que Jaime tenía más de 100 reuniones con Otero: “Noté que era el único empresario que tiene tantas reuniones, entonces algo había. Ahora parece que se están terminando de descubrir que cosas tenían juntos…”.
Rubio no dudo nunca de la relación entre Otero y Jaime, pero en relación al proceso judicial del concesionario “no me convence que todo esto sea real, que no sea algo que está armado. Voy a comenzar a convencerme que la Justicia hace algo cuando le saquen los negocios que tiene y se los den a otros, y sobre todo que no sean socios de él”, y agregó: “Sus incumplimientos son enormes, basta leer los informes de la Auditoria General de la Nación o recorrer la Terminal de Mar del Plata”.
De acuerdo con Rubio, no se pueden ignorar otros vínculos que tiene el empresario en la ciudad: “No podemos obviar la relación que tiene Otero con el señor Iglesias. Están juntos en el Provincial y en el proyecto de la vieja terminal. Iglesias es un señor del que nadie se anima a hablar”.
En el proyecto que involucra a Otero para adjudicarse el predio de la antigua estación también hay otros empresarios de la ciudad. “El resto de los empresarios de Mar del Plata, ¿no van a decir nada con respecto a esto? ¿qué pasa con ellos, si saben todo lo que sucede? ¿cuándo van a hablar sobre con quien se están juntando?”, se cuestiona Rubio. “Hasta el día que los políticos empiecen por darle lo que corresponde y a quitarles los negocios que les corresponde, yo tengo el derecho a pensar como vecino que esto es un negociado”, y se preguntó: “¿Cómo es que un ciudadano común se mandé una ´macana´ y no pueda trabajar más en su vida y este tipo se manda todas las ´macanas´ juntas, y le siguen entregando el patrimonio nacional?”.
Daniel Rubio al igual que todos los vecinos de la zona, llevaba una vida normal, en un tradicional barrio de la ciudad, pero ahora con los ruidos durante todo el día, el tránsito, el movimiento, “siento que me arruinaron la vida con un gran negociado”. “Estaba tranquilamente en mi casa, pero la situación me llevó a involucrarme más, desde mi lugar”, afirmó.
Muchas de las obras que estaban pautadas al momento de trasladar la terminal no se hicieron y hoy el barrio sufre transformaciones y complicaciones que parecen no tener soluciones a corto plazo: los pluviales no han sido arreglados, ante lluvias intensas se inundan algunas zonas, las calles no están preparadas para soportar el tránsito, las veredas están rotas, los taxis no tienen el suficiente espacio para ubicarse, entre otros inconvenientes.
“No puedo creer que esto sea gratis, alguien se ha beneficiado con todo esto. No puede ser que le haya arruinado la vida a un montón de gente tanto de este barrio como a los comerciantes de la vieja terminal”.
“Por el bien de la comunidad se pueden hacer algunas cosas, pero para el bien de los bolsillos de un señor y de funcionarios asociados, la situación cambia y me molesta, porque no es lo que debería ser”, finalizó Rubio.
El intendente Cristian Breitenstein rechazará otorgarle la concesión de la terminal a TEBA
Finalmente, el intendente Cristian Breitenstein no le otorgará la concesión de la terminal a la empresa TEBA, contrariamente a lo que él mismo había dejado trascender públicamente días atrás.
Es que los allanamientos ordenados y encabezados por el juez federal Norberto Oyarbide el pasado lunes en la terminal de Retiro tuvieron la suficiente gravedad, como para que el jefe comunal bahiense diera marcha atrás con una decisión que estaba casi tomada.
Tras varias horas de procedimiento, Oyarbide se llevó de las oficinas de TEBA en Capital decenas de documentos con los que buscará probar que la concesionaria de la terminal era la que pagaba el alquiler del lujoso departamento particular del ex secretario de Transporte de la Nación, Ricardo Jaime. Justamente, ese mismo funcionario era quien debía controlar a esa empresa.
Como si fuera poco, en otra causa penal Jaime y el empresario titular de Terminal Buenos Aires, Néstor Otero, fueron procesados la semana pasada por presuntas irregularidades en la prórroga de la concesión de la estación de micros de Retiro.
Todos esos hechos fueron los que evaluó Breitenstein y su círculo más cercano a la hora de abortar lo que era inminente: darle la concesión de la terminal de ómnibus de Bahía Blanca a TEBA.
Una alta fuente política muy cercana a Breitenstein le dijo a LABRÚJULA24.com que “tendríamos que estar locos para darle la concesión de la terminal a TEBA. Con el ‘ruido’ que tiene esa empresa sería una verdadera locura y tener ganas de comprarnos un quilombo de gusto”.
Por el momento, en Alsina 65 estudian los pasos a seguir y evalúan al resto de las posibles empresas que podrían ser los concesionarios de la estación de colectivos. En tanto, todos los consultados daban por descartado que la propia Municipalidad se siga haciendo cargo de algo que le provoca perdidas por más de 200 mil pesos al mes.
Preocupado y molesto por la situación que estaban viviendo los vecinos con la construcción de la terminal, Rubio comenzó a investigar los negocios de Otero en Mar del Plata, Buenos Aires y otras localidades de la Provincia. Buscando información sobre las actividades del concesionario, se enteró que Jaime tenía más de 100 reuniones con Otero: “Noté que era el único empresario que tiene tantas reuniones, entonces algo había. Ahora parece que se están terminando de descubrir que cosas tenían juntos…”.
Rubio no dudo nunca de la relación entre Otero y Jaime, pero en relación al proceso judicial del concesionario “no me convence que todo esto sea real, que no sea algo que está armado. Voy a comenzar a convencerme que la Justicia hace algo cuando le saquen los negocios que tiene y se los den a otros, y sobre todo que no sean socios de él”, y agregó: “Sus incumplimientos son enormes, basta leer los informes de la Auditoria General de la Nación o recorrer la Terminal de Mar del Plata”.
De acuerdo con Rubio, no se pueden ignorar otros vínculos que tiene el empresario en la ciudad: “No podemos obviar la relación que tiene Otero con el señor Iglesias. Están juntos en el Provincial y en el proyecto de la vieja terminal. Iglesias es un señor del que nadie se anima a hablar”.
En el proyecto que involucra a Otero para adjudicarse el predio de la antigua estación también hay otros empresarios de la ciudad. “El resto de los empresarios de Mar del Plata, ¿no van a decir nada con respecto a esto? ¿qué pasa con ellos, si saben todo lo que sucede? ¿cuándo van a hablar sobre con quien se están juntando?”, se cuestiona Rubio. “Hasta el día que los políticos empiecen por darle lo que corresponde y a quitarles los negocios que les corresponde, yo tengo el derecho a pensar como vecino que esto es un negociado”, y se preguntó: “¿Cómo es que un ciudadano común se mandé una ´macana´ y no pueda trabajar más en su vida y este tipo se manda todas las ´macanas´ juntas, y le siguen entregando el patrimonio nacional?”.
Daniel Rubio al igual que todos los vecinos de la zona, llevaba una vida normal, en un tradicional barrio de la ciudad, pero ahora con los ruidos durante todo el día, el tránsito, el movimiento, “siento que me arruinaron la vida con un gran negociado”. “Estaba tranquilamente en mi casa, pero la situación me llevó a involucrarme más, desde mi lugar”, afirmó.
Muchas de las obras que estaban pautadas al momento de trasladar la terminal no se hicieron y hoy el barrio sufre transformaciones y complicaciones que parecen no tener soluciones a corto plazo: los pluviales no han sido arreglados, ante lluvias intensas se inundan algunas zonas, las calles no están preparadas para soportar el tránsito, las veredas están rotas, los taxis no tienen el suficiente espacio para ubicarse, entre otros inconvenientes.
“No puedo creer que esto sea gratis, alguien se ha beneficiado con todo esto. No puede ser que le haya arruinado la vida a un montón de gente tanto de este barrio como a los comerciantes de la vieja terminal”.
“Por el bien de la comunidad se pueden hacer algunas cosas, pero para el bien de los bolsillos de un señor y de funcionarios asociados, la situación cambia y me molesta, porque no es lo que debería ser”, finalizó Rubio.
Oterito se queda sin la terminal de Bahia Blanca???
El intendente Cristian Breitenstein rechazará otorgarle la concesión de la terminal a TEBA
Finalmente, el intendente Cristian Breitenstein no le otorgará la concesión de la terminal a la empresa TEBA, contrariamente a lo que él mismo había dejado trascender públicamente días atrás.
Es que los allanamientos ordenados y encabezados por el juez federal Norberto Oyarbide el pasado lunes en la terminal de Retiro tuvieron la suficiente gravedad, como para que el jefe comunal bahiense diera marcha atrás con una decisión que estaba casi tomada.
Tras varias horas de procedimiento, Oyarbide se llevó de las oficinas de TEBA en Capital decenas de documentos con los que buscará probar que la concesionaria de la terminal era la que pagaba el alquiler del lujoso departamento particular del ex secretario de Transporte de la Nación, Ricardo Jaime. Justamente, ese mismo funcionario era quien debía controlar a esa empresa.
Como si fuera poco, en otra causa penal Jaime y el empresario titular de Terminal Buenos Aires, Néstor Otero, fueron procesados la semana pasada por presuntas irregularidades en la prórroga de la concesión de la estación de micros de Retiro.
Todos esos hechos fueron los que evaluó Breitenstein y su círculo más cercano a la hora de abortar lo que era inminente: darle la concesión de la terminal de ómnibus de Bahía Blanca a TEBA.
Una alta fuente política muy cercana a Breitenstein le dijo a LABRÚJULA24.com que “tendríamos que estar locos para darle la concesión de la terminal a TEBA. Con el ‘ruido’ que tiene esa empresa sería una verdadera locura y tener ganas de comprarnos un quilombo de gusto”.
Por el momento, en Alsina 65 estudian los pasos a seguir y evalúan al resto de las posibles empresas que podrían ser los concesionarios de la estación de colectivos. En tanto, todos los consultados daban por descartado que la propia Municipalidad se siga haciendo cargo de algo que le provoca perdidas por más de 200 mil pesos al mes.